Era mi tercer semestre en la Uni, y ya había tenido un novio formal (de esos de visitas en casa y que toda la familia conoce), como habíamos empezado muy jóvenes, yo no tenía ningún tipo de experiencia sino solo con él y algún chico que me había gustado por allí…., pero nada serio. Él quería siempre llevarme e irme a buscar a la Uni, y como me era cómodo, dejé que lo hiciera. Sin embargo al comenzar el 3er semestre, mi papi hermoso y lindo me sorprende con un carrito que había estado arreglando en un taller de un amigo, un Fiat viejito él, pero que mi papi lo puso a todo dar durante todo un año.

Ahora tenía mi propio carro para movilizarme e ir a donde quisiera, y eso empezó a distanciarme del que era mi novio, porque seamos claros, me tenía la mecha corta, llevándome y trayéndome. Ahora podía ir a estudiar por mis propios medios a la casa de cualquiera, hacer actividades extra curriculares, podía tomar un curso de algo que me interesara sin tener que preguntarle al novio si estaba dentro de sus posibilidades llevarme, ahora…era libre, libre al fin. Al tener ese nuevo instrumento en mi vida, comencé a alejarme del novio y aunque él quería seguir nuestra relación, yo decidí que ya había estado suficiente tiempo a su lado, durante la segunda parte de mis estudios secundarios y ahora en la Universidad, pensé que no era justo pasarlos con una sola persona, sin saber que más había en la vida. Terminamos y comienzo por primera vez en años a ser una chica soltera, podía decidir si quería salir en grupo, si quería ir a estudiar en casa de un amigo que vivía más lejos y llegar a mi casa con el cuento de….estábamos estudiando.

Mi mejor amiga estaba en pareja y su esposo tenía un alto cargo ejecutivo en una cervecera, por lo que ella siempre nos regalaba una caja de cervezas cuando íbamos a estudiar, o para el fin de semana o a realizar cualquier actividad, y eso se fue convirtiendo en adictivo. Siempre había alguien que decía: vayamos a estudiar en casa de no sé quien y Tais que ponga la bebida. Por supuesto estudiábamos poco y entre libro y libro una jodedera y cerveza y cerveza, poca comida, quizás 2 bolsas de snack. Casi todos éramos solo estudiantes, por lo que no contábamos con mucho dinero. Cuento esto para explicarles, porque todos íbamos súper mal en las materias que requerían más atención, ejemplo Análisis de Estados Financieros.

Dicha materia era de las más importantes dentro de la carrera, y la cátedra la daba un profesor que se jactaba de reprobar a la mayoría de su curso y como la asignatura prelaba a varias materias en los sub siguientes semestres, todos sufríamos horrores por aprobar. Tais mi amiga sabía que las calificaciones no  nos daban, por lo que necesitábamos un trabajo, un quiz, algo que nos hiciera subir la nota antes del examen final. Con el profesor de dicha materia, algunas veces coincidíamos en el comedor, nosotras junto a otros estudiantes y el con su grupo de profesores . Tais me propone una estrategia, como ella tenía acceso a las cervezas, se llevaría un par de cajas en la maleta de su coche, las dejaría allí y le diríamos al profe que le queríamos dar un regalo porque había tenido recién una bebé, y allí le diríamos para hacer un trabajo que nos ayudara a subir la nota, antes del examen final.

Nos acercamos en el receso, y le dijimos que le queríamos dar un regalo por el nacimiento de su hija, pero que estaba en el carro de mi amiga, cuando fuimos al estacionamiento y ella le enseña las cajas de cervezas, la cara de él era un poema, su sonrisa y la alegría que tenía, no cabían en su rostro. Como aún no era la hora de salida, no concretamos como íbamos a hacer para pasar las birras a su auto. Quedamos en que él nos buscaría en la aula 1-A, cuando terminara la jornada y así todos juntos dirigirnos al estacionamiento y que él pasara las cajas de cervezas a su vehículo. Tais y yo estábamos felices, ya con el profe en el estacionamiento le propondríamos una evaluación adicional, y así llevar un mejor promedio. Pero….el susodicho nos sorprendió en el estacionamiento, diciéndonos que no tenía carro que si le podíamos dar un aventón a su casa. Ni modo, Tais se excusa diciendo que tiene que irse para montar el almuerzo a su esposo, y quedo yo…con la fiebre de manejar a millón y con ganas de hacerme la simpática llevando al profesor a su lugar de residencia.

Durante el trayecto, él me dice que si mi novio no se molestaría (ilusa yo, pensando que mostraba preocupación por mi horario), yo, muy crecida le digo, no tengo novio, terminamos, y él comienza a husmear las razones por las cuales se terminó la relación (creo para saber si estaba triste o ya lo había superado). Me dice: es lo mejor que pudiste hacer, tienes mucho por vivir y experimentar y al estar en una relación formal, no te permitiría avanzar en tu vida. Yo feliz y agradecida de que un profesor, con cierto nivel de autoridad y con 25 años más que yo, considerara que estaba bien lo que había hecho, y no lo viera como un error (como lo veía mis familiares cercanos).

Llegamos a su residencia, muy formal él, y en vez de bajarse, me pregunta si quiero conocer a su hija, yo prácticamente me bajé del carro a ayudarle con sus cajas y diciéndole que sí, porque se suponía que conocer a la hija, significaba conocer a la esposa e iba a estar todo bien y nosotras tendríamos altas posibilidades de pasar ese curso ya que éramos parte de su entorno, que ilusa yo. Subimos, nos abre la puerta su esposa y le dice menos mal que llegaste porque tengo que comprar algo en la tienda y necesito que te quedes con la bebé; va a  su cocina (nunca mostró incomodidad por mi presencia), trae un café y un pedazo de torta o algún tipo de dulce, lo deja en la mesita y se dispone a irse, yo propongo…si quiere bajo con usted, ella dice, no te preocupes, conoce a la niña. Ella sale, yo me quedo sentada en la sala y sale el profesor del cuarto de su bebé, pssst (me llama con el dedo), quieres verla, yo me levanto y voy donde me dice, la beba está en su cuna, yo me asomo y pongo mis manos en la baranda y allí el profe pone sus manos sobre las mías y me dice es bella verdad? ¿No te gustaría que fuera tuya? Yo me alejo, intento devolverme sobre mis pasos, pero él se me adelanta y me corta el camino, yo trato de esquivarlo y veo como hacer para salir de allí, pero caigo en otro espacio del cuarto y hay una cama (evidentemente la cama donde duerme la o las personas que se quedan con la bebé), yo le digo que pasa profesor suélteme?, y él me contesta: crees que no me he dado cuenta de que has estado coqueteándome todo el día, hasta me dijiste que no tenías novio, yo le contesto: se lo dije porque Ud. me lo preguntó, mentira me lo dijiste para que supiera que estabas disponible, no profesor en serio…a todas estas él me empujaba contra la pared que mediaba entre esa cama y la cuna. Profesor no quiero, y él me dice no hagas ruido que despertarás a la niña, y yo le digo gritaré y él me dice shhhh (poniendo su dedo encima de mi boca), el cual aproveché para morderlo, pero eso lo puso más excitado y su mano la dejó caer y la metió bajo mi falda y tocó toda el área de mi vagina, yo llevaba una falda de blue jean y pensé …esto no puede estar pasando, yo lucho a boca cerrada (no sé porque no quería despertar a la niña), el insiste con su mano y logra bajar mis bragas hasta la rodilla y me empuja para que caiga en la cama, en ese momento me dice quítate la camisa y yo le digo no, a la vez él se está bajando el pantalón pero sigue con ellos puestos, se posa sobre mí y me dice…necesito probar tus senos y procede a quitarme la blusa quedando solo con un sostén, una falda y pantaletas a mitad de la rodilla que actuaban como una tranca para poder levantarme, el comienza a besar mis pechos y a pesar de mi lucha, los pezones se ponen duros, y comienza a escarbar en mi cuello, a respirar detrás de mi oreja y mi nivel de excitación se dispara, el me susurra, desde el primer día que entraste al salón de clases, desee tenerte así y hacerte mía, yo evitaba que besara mi boca (como si eso me haría más limpia), el sigue tocando mi cuerpo logra zafar la panty de una pierna y ya no estaba tan apretada, baja su bóxer y veo un miembro de un tamaño que jamás había visto, me asusto, le digo en el oído al momento de lamerme la oreja, esto es una violación y su esposa se va a enterar,  y él: no le dirás nada, porque tú lo quieres tanto como yo, a todas estas mis manos las había puesto debajo de mis nalgas, yo solo me corcoveaba con las piernas y mi cuerpo moviéndose de un lado a otro, él saca mis manos de abajo y las agarra con un cordel que había cerca, me termina de sacar la panty y observo su miembro erecto, enorme en dirección a mis piernas las cuales había abierto de par en par, yo intento con todas mis fuerzas cerrarlas pero sus manos eran más fuertes, las abrió de nuevo, me pone su pene encima de mi clítoris, yo me sigo negando, sin hacer mucho ruido, como si tuviera un pañuelo en mi boca, el lame mi vagina, acaricia con su lengua mi clítoris con una fuerza desgarradora, de un lado a otro y coloca todo el peso de su cuerpo, sobre mí, su pene ahora rozaba mi clítoris y yo dejé de moverme en negación y me dije : que haga lo suyo y te vas, su miembro era tan poderoso que tuvo que agarrarlo con una mano para poder dirigirlo hacia su objetivo y pensé en gritar en ese momento, pero para mi sorpresa estaba excesivamente mojada, el rozó a golpecitos mi clítoris e hizo su entrada lentamente como para que no me doliera y al tenerlo adentro, sentí un infinito placer, dejé de patalear el empezó a darme a un ritmo lento como para que me fuera adaptando a su tamaño, e inesperadamente lo sacó de mi cuerpo y yo empapada me acomodé mejor y él dijo ya eso es todo, y entonces yo me incorporé y le pedí que por favor terminara con lo que había empezado, que ya no había más remedio, volvió a rodear todas mis terminaciones nerviosas alrededor de mi vulva y allí se metió suavecito, pero luego comenzó una embestida más fuerte y yo me rendí y busqué mi ritmo y comencé a moverme el me besó yo esta vez correspondí y sentía su falo húmedo dentro de mí con un placer impensado y quería y le pedí mas y el me daba más rápido, sentí que pasaban horas, sin embargo solo eran minutos, el no pudo aguantarse más y se corrió y yo junto a él, asombrada de lo intenso que fue todo, una explosión de sabor. Rápidamente se levantó me dijo que me fuera al baño y me lavara, lo que hice de forma apresurada, estiré mi camisa, me arregle la cola de mi cabello, coloqué en mi otra pierna la braga que rodaba por el tobillo la subí y salí a toda prisa donde se encontraba mi mochila, él dijo que la esposa aún no llegaba y me marcó el ascensor y yo me fui, aunque sorprendida de lo que acababa de pasar y lo mucho que lo había disfrutado.

Al llegar, mi mamá me dice que llames a Tais, que quería saber que pasó. La llamo, ella pregunta: porque te demoraste tanto, le digo que el carro se apagó y no me quería prender y que el profesor diligentemente me ayudó a encender mi motor y que todo bien.

Al día siguiente al salir de la clase, él nos llamó a su escritorio y nos dijo que había estado revisando los exámenes y los trabajos que habíamos entregado y que se dio cuenta que no nos había evaluado como debía, que seguramente estaba de mal humor al hacer la evaluación y que nos podría la nota que merecíamos por haber hecho tan buen trabajo. Tais al salir me dijo al oído…lo que no hace una caja de cerveza no lo logra nadie, te lo dije….